El pasado 21 de septiembre realizamos una videoconferencia entorno a los principales fenómenos vistos a raíz de la última sesión de la Anticumbre del G77, entidad conformada actualmente por 134 países. Para ello nuestros panelistas hicieron hincapié en lo siguiente: 1) Alejandro Cardozo señaló los avances en materias de inteligencia artificial que se ha generado desde Venezuela y cómo ello ha permitido un dominio del sistema de información, que se ha exportado hacia otras regiones, abriendo el debate hacia el peligro que implica que un régimen autoritario detente este poderío de la información. 2) Hilda Landrove nos compartió desde los movimientos sociales y de activismo los puntos que indican mayor preocupación tras la reunión, entre ellos la soberanía en función del imperialismo, el rechazo a las imposiciones, solidaridad al bloqueo de Estados Unidos a Cuba, rechazo a la intervención de organismos internacionales y la fachada de inclusividad que es indiferente ante los regímenes no democráticos. 3) Douglas Castro expuso su postura desde lo que para Nicaragua significó participar de la cumbre, señalando la importancia de la academia para ser crítica ante estas iniciativas multilaterales que cuestionan la democracia. Por último, José Raúl Gallego compartió la vivencia desde la Habana, como sede del evento, marcando hechos de represión a la ciudadanía que se daban a la par que se realizaba la cumbre, como muestra de esa doble moral en política exterior. 

Todos estos discursos de la cumbre del G77 fueron replicados y llevados más adelante a la reunión de Naciones Unidas que sucedió días después de la realización de la cumbre, y permite entrever un discurso de oposición entre las ‘naciones del sur’ y las ‘naciones del norte’, que a su vez también desafía las normas internacionales ya establecidas así como el orden económico mundial ya establecido, pues recalca una retórica común empeñada en responsabilizar a unos y victimizar a otros actores del sistema internacional de las principales problemáticas actuales: crisis climática, desigualdad económica, bloqueos económicos, desigualdades en avances tecnológicos entre otros, pero es esa misma retórica la que omite la importancia del cuidado de los derechos humanos en el proceso por dar una solución a dichas problemáticas.

*Reseña realizada por: Angela Mariottiz