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FORO CUBANO Vol 6, No. 66 – TEMA:  PROTESTAS EN CONTEXTOS AUTORITARIOS

Seis años después de la Gran Marcha del Retorno 

Por:  Valentina Duarte Salazar 
Abril y mayo 2024

Todos los ojos están puestos en Rafah. Hace una semana, la ciudad meridional de Gaza, que albergaba a 1,5 millones de desplazados palestinos por la guerra, se convirtió en el centro de atención para el mundo entero ante la ejecución de una serie de ataques ilegítimos y atroces perpetrados por parte de Israel. Los cuatro ataques efectuados a un campo de refugiados, categorizado por el derecho internacional humanitario como un bien de carácter civil sujeto a protección, ocasionaron que 200 personas resultaran heridas y que hasta el momento 95 civiles hayan fallecido. El conflicto actual ente Israel y Palestina, que se ha exacerbado en el presente año de 2024, ya supera la suma de 34.000 muertos. Ante el riesgo real e inminente de un genocidio, se hace necesario revisar la ruta que deberían seguir las organizaciones internacionales para no solo proteger a las poblaciones desfavorecidas de este conflicto, sino también planificar una resistencia adecuada ante esta escalada extrema del conflicto. 

Como una explicación breve a la complejidad del conflicto que podemos presenciar hoy, la Guerra en Gaza sitúa sus orígenes desde finales del siglo XIX cuando el Sionismo llevó a que una comunidad amplia de judíos-israelís reclamaran como propio el territorio de Palestina, que se encontraba históricamente ocupado por palestinos. A partir de la creación del Estado de Israel en 1948 se generó nuevamente, y a partir de un fraccionado reconocimiento internacional, una expansión ilegítima del territorio israelí que mermó aún más el territorio perteneciente a Palestina y empezó a generar desplazamientos masivos de esta población. A mediados del siglo XX, más de 700.000 palestinos fueron expulsados forzosamente de sus hogares por israelís y redirigidos a la Franja de Gaza y Cisjordania, dos zonas que fueron nuevamente ocupadas por Israel en 1967, ocasionando nuevamente la producción de un éxodo palestino. 

La dinámica de estas ocupaciones ilegales por parte de Israel traspasó las fronteras del tiempo y generó que, en el presente siglo, fueran organizadas por parte del pueblo palestino diferentes manifestaciones para hacer frente a los abusos propiciados por parte del Estado autoritario Israelí. Una de las manifestaciones más recientes fue la del 2018, donde el pueblo palestino se unió en "La Gran Marcha del Retorno" en Gaza. A través de protestas pacíficas, diversos manifestantes palestinos se reunieron en la valla perimetral que separaba a Gaza de Israel para protestar en contra del bloqueo que había desplegado Israel por tierra, aire y mar a la Franja de Gaza. Tal como lo dispuso Amnistía Internacional (2018), el bloqueo aseguró la existencia de restricciones para las importaciones y exportaciones de materias primas a Gaza, una ciudad cuya población está compuesta en un 70% por refugiados provenientes de la ocupada Palestina. El bloqueo generó que la economía gazatí se deteriorara aún más y que los servicios de salud dentro de esta zona se volvieran aún más precarios. 

Los palestinos buscaron llamar la atención de la comunidad internacional ante la lucha de cientos de miles de personas que buscaban recuperar su hogar después de haber sido injustamente expulsados de él. El objetivo principal de las protestas era, no solo finiquitar los bloqueos alrededor de Gaza, sino también solicitar al Estado de Israel la devolución de los territorios palestinos que habían sido ocupados de manera ilegal desde el siglo XIX. 

 

Pese a que las manifestaciones se mantuvieron en todo momento pacíficas, salvo la excepción de algunos casos aislados de manifestantes que prendieron fuego a llantas y lanzaron piedras, las fuerzas israelíes repelieron a los manifestantes utilizando gases lacrimógenos, tanques, francotiradores, vehículos militares, e inclusive disparando directamente a los manifestantes para repeler las protestas. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) crearon lo que se denominó como “una zona militar cerrada”. La orden israelí sobre esta zona fue disparar a cualquier individuo del lado de Gaza que se acercara a menos de 400 metros de la valla. Fue tal la violencia desplegada contra los manifestantes palestinos que, solo en un día, específicamente en el 14 de mayo de 2018, que conmemoraba la víspera del 70° aniversario de la "Nakba" (momento en el que los palestinos conmemoran el desplazamiento y la desposesión de cientos de miles de personas en 1948-1949, durante el conflicto que siguió a la creación del Estado de Israel), las fuerzas israelíes asesinaron a 59 personas palestinas en un singular ejemplo de uso excesivo de la fuerza. Según el Palestinian Center for Human Rights (2018), durante los seis meses de manifestaciones, a al menos 76 manifestantes se les fueron amputadas extremidades inferiores o superiores de sus cuerpos a raíz de los ataques propinados por las fuerzas israelíes.  

Volviendo al conflicto actual se puede determinar que las tensiones entre Palestina e Israel son cíclicas y, a lo largo de la historia, han escalado en la ejecución de una violencia desproporcional por parte de Israel. La Gran Marcha del Retorno fue un evento que destacó la desesperación y la difícil situación de los habitantes de Gaza, una condición que sigue siendo relevante en la guerra de 2024. Asimismo, y como un signo de la violencia brutal desplegada por el Estado Israel, tanto en conflicto actual como las manifestaciones del 2018 dejan entrever a este Estado autoritario como un violador sistemático de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario que no teme abusar de la Fuerza Pública para acometer crímenes atroces contra la humanidad. 

En una coyuntura donde el foco de atención global está situado en los crímenes de guerra que están ocurriendo actualmente en Gaza, es menester analizar la inspiración que subyace detrás de manifestaciones como la Gran Marcha del Retorno. Esta marcha, que comenzó en marzo de 2018, ha sido una expresión de resistencia y lucha por la justicia y la libertad para el pueblo palestino, y ha servido como un horizonte para una comunidad internacional que se encuentra en la responsabilidad de ofrecer apoyo y resistencia al pueblo palestino.  

Referencias Bibliográficas 

 

Amnistía Internacional (2018): SEIS MESES DESPUÉS: LA GRAN MARCHA DEL RETORNO EN GAZA, en: https://www.amnesty.org/es/latest/campaigns/2018/10/gaza-great-march-of-return/ 

 

Palestinian Center for Human Rights (2018): For Twenty-Eighth Friday of Great March of Return and Breaking Siege in Eastern Gaza Strip, Israeli Forces Kill 3 Civilians, Including Child, and Wound 171 Others, Including 14 Children, 3 Journalists and 3 Paramedics, en https://pchrgaza.org/en/for-twenty-eighth-friday-of-great-march-of-return-and-breaking-siege-in-eastern-gaza-strip-israeli-forces-kill-3-civilians-including-child-and-wound-171-others-including-14-children-3-journalists/  

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